jueves, 29 de marzo de 2012

Controversia en torno a Repsol-YPF como nexo de la problemática en torno a las Islas Malvinas

     Los invito a escuchar la entrevista que le realicé al Lic. en Historia, Economía y Sociología Rómulos Montes -Profesor en la UE Siglo 21 y la UNC- en referencia al tema de la controversia en torno a Repsol-YPF como nexo de la problemática en torno a las Islas Malvinas.

http://www.fileserve.com/file/RP9Kjju/Entrevista Prof. Romulo 26-03-12.mp3



martes, 20 de marzo de 2012

Argentina en la controversia EEUU-Israel-Irán

        La semana pasada, cuándo terminábamos la columna en la cual tratamos el tema relacionado a la controversia en torno a Irán y cómo este tema se cuela en la agenda doméstica estadounidense -en marco de las elecciones- en virtud de la visita del Primer Ministro israelí Benjamín Netanyahu a Barack Obama, finalizábamos diciendo que el día de hoy íbamos a tener en cuenta una serie de cuestiones.


            En lo que se refiere al panorama regional y las consecuencias de un conflicto armado, ya lo hemos analizado anteriormente. El que más interés suscita es el relacionado al papel que puede llegar a interpretar nuestro país en marco de esta controversia. Algunos se preguntarán qué nexo puede existir entre la Argentina y un país que se encuentra en una región tan alejada. En Medio Oriente, como lo hemos contextualizado, se produce una lucha de poder entre Israel y los demás Estados, con los cuales mantiene diferencias políticas, culturales y de criterio. Israel es un Estado que, en virtud de la Resolución 181 de la AGNU, fue creado para alojar a la comunidad judía, quienes venían reclamando dicho derecho de manera formal desde hacía cincuenta años. El problema es que la partición del territorio conocido como Palestina se encontraba ocupado, lo cual dio origen al conflicto árabe-israelí. Pero lo que queremos dejar asentado en esta breve y simplificada reseña, es que Israel representa a la comunidad judía.


            Así llegamos al dato que marca el nexo de la Argentina con la controversia: la población judía en la Argentina es la más grande de América Latina y la sexta más grande del mundo fuera de Israel. Al año 2006 se calculaba una población de alrededor de 184 mil 500 judíos según algunas estimaciones -otras, basadas en un informe del JOINT (o JDC: Jewish Joint Distribution Committee, comisión judía de distribución conjunta) estimaba en el año 2005 a 233 mil judíos en Buenos Aires y alrededores-. Este dato toma aún más importancia cuando repasamos la historia reciente de nuestro país. Justamente, el día de mañana se conmemora los veinte años del atentado a la Embajada Israelí en nuestro país – desapareciendo literalmente la sede diplomática, el convento, el geriátrico y la iglesia-, el cual se cobró 29 vidas y 242 heridos, y siendo hasta ese momento el hecho más brutal contra civiles desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. Dos años después, más precisamente el 18 de julio de 1994, se perpetró un nuevo ataque terrorista en este caso a la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) de Buenos Aires, con un saldo de 85 personas muertas y 300 heridas –siendo de esta forma el peor atentado en la historia de nuestro país-. La hipótesis que se sostiene es que la Argentina fue elegida como blanco del ataque tras la decisión del gobierno de suspender un acuerdo de transferencia de tecnología nuclear a Irán. Desde entonces, el gobierno argentino ha requerido a Irán la extradición de sus ciudadanos acusados por el ataque para ser juzgados por un tribunal argentino o extranjero, pero Irán se ha negado a acatar el fallo de la justicia argentina.


            Se le atribuye tanto uno como otro ataque a la agrupación Hezbolá –Partido de Dios-, el cual es un grupo que nació en marco de la Revolución Islámica, la cual en el año 1979 proclamó el triunfo del ayatolá Jomeini. El Hezbolá se mantiene activo tanto en Irán como en Líbano donde el mes pasado su jefe, el chiita Hasan Nasralá, reconoció por primera vez que su formación es financiada y equipada por Irán. Con esto no estamos queriendo decir que esté próximo un ataque a nuestro país, que no se malentienda. Sino que nuestro país tiene interés en dicha controversia y puede jugar un rol importante, basta recordar que en Noviembre el nombre de nuestro país se escuchó cuando EEUU denunció supuestos ataques hacia las embajadas de Arabia Saudita e Israel por parte de Irán.

            Sin embargo, estoy de acuerdo con  el Lic. Paulo Botta, quien dice: “Desde mi punto de vista las relaciones entre Argentina e Irán no son estrictamente bilaterales, sino que forman parte de un triángulo donde Argentina mira constantemente a Estados Unidos y, en función de lo que quiere Argentina con Estados Unidos (el principal eje de inserción internacional del país), se acerca o se aleja de Irán”[1]. Argentina tendrá una política reactiva en este caso, en la cual deberá estar atenta tanto a lo que establezca EEUU como a lo que dicte Israel, quien como hemos advertido, a través de su grupo de presión influye en las decisiones del ejecutivo norteamericano.


lunes, 12 de marzo de 2012

Obama en busca del “voto judío”: Irán se cuela en las elecciones

Los invito a leer la columna de la semana pasada que me han publicado en el sitio GEIC -Grupo de Estudios Internacionales Contemporáneos-. Recomiendo, a su vez, la lectura de otras notas muy interesantes.


http://www.geic.com.ar/2010/2012/03/12/obama-en-busca-del-voto-judio-iran-se-cuela-en-las-elecciones/

sábado, 10 de marzo de 2012

Obama en busca del "voto judío": la controversia con Irán se cuela en las elecciones

                Si pudiéramos señalar una región compleja en el mapa mundial, sin dudas Medio Oriente sería una de ellas. A la presencia de las potencias occidentales -a partir del 2001 en Afganistán y en el 2003 en Irak –y la denominada “Primavera Árabe”, existen una serie de actores como Israel, Palestina e Irán que hacen que el juego geopolítico sea aún más problemático.


            El Lunes pasado se reunieron en la Casa Blanca Barack Obama –Presidente de los EEUU- y Benjamin Netanyahu –Primer Ministro de Israel- durante un lapso de dos horas. Allí estuvieron discutiendo sobre cuáles van a ser las próximas medidas a tomar con respecto a Irán y su plan de desarrollo de energía nuclear.

            Si bien Obama dejó asentada su posición de buscar una solución pacífica, manifestó que “(…) su compromiso con la seguridad israelí es inquebrantable”. Lo cual se suma a las sanciones económicas que se le han impuesto al régimen de Ahmadineyad luego de su negativa de frenar el plan de desarrollo de energía nuclear y el asalto a  la embajada británica, el último mes de Noviembre.


            Esta manifestación de apoyo y endurecimiento de Obama se condice con el panorama electoral de los EEUU, quien el 6 de Noviembre elegirá por la reelección del actual Presidente demócrata o por la opción del candidato republicano, la cual todavía no se ha definido. Luego del Súper Martes parece que Mitt Romney asoma como el precandidato con mayor apoyo, pero Newt Gingrich y Rick Santorum aún continúan con aspiraciones. Pero, ¿qué relación guarda el apoyo que puedan tener los EEUU con Israel y las elecciones?

            Los judíos tienen el mayor porcentaje de participación de votantes comparado con cualquier grupo étnico. Si bien la población judía es de seis millones de habitantes en los EEUU -alrededor de 2.3 % de la población total-, aproximadamente el 94% vive en trece estados importantes del colegio electoral. Al agregar a los no judíos pro Israel, principalmente a los denominados “(…) cristianos evangélicos, se puede inferir que su apoyo es significativo en la elección del Ejecutivo”. Siguiendo a García Valdecasas, los cristiano evangélicos “(…) engloban un amplio espectro de iglesias protestantes: luteranos, metodistas, baptistas, adventistas, etc., constituyendo el 25% de la población de EEUU. (…) El dato es más importante aún cuando se agrega que un tercio de ellos pertenece a algún grupo radical sionista cristiano”.

            La relación entre estos dos grupos proviene de la creencia adventista de que la segunda venida de Jesucristo está próxima y tendrá lugar en un Israel poblado de judíos, para lo cual es central la conformación del Gran Israel. Entonces, los posibles candidatos tienen un incentivo para ser pro Israel, lo que refuerza el apoyo a ese Estado en el Congreso, ya que no hay beneficios teniendo una posición abiertamente anti Israel y los costos son considerables. Por un lado por la pérdida de contribuciones de campaña, y por otro por los votos de los judíos y no judíos.  En definitiva, deben ser especialmente sensibles a las preocupaciones de los votantes judíos, por lo que se deduce que la política exterior del candidato seleccionado se verá influenciada por las promesas que se realizaron durante la campaña, tal cual observamos en la actualidad con Obama.


            Aparte debemos señalar las siguientes relaciones entre: el grupo de presión pro israelí-derecha israelí, grupo de presión pro israelí-Partido Republicano, grupo de presión pro israelí- Neoconservadores, derecha israelí-Neoconservadores y Partido Republicano-Neoconservadores. Pudiendo inferir la relación derecha israelí- Partido Republicano, lo cual es significativo para la contienda electoral. Es más, Netanyahu ha radicalizado su discurso porque los republicanos norteamericanos -a los que apoya- también lo han hecho. “Los discursos antisiria y antiirán pueden hacerles ganar votos tanto a republicanos como a los representantes de la extrema derecha de Israel” y, en este sentido, los republicanos ya han intentado atacar a Obama con frases como que “ha vuelto su espalda” a los israelíes, o que si “Obama sale reelecto, Irán tendrá un arma nuclear”.[1]

            Por su parte, Israel desde el comienzo del plan nuclear iraní –en el año 2008- viene anunciando un ataque unilateral y preventivo contra el Estado persa, ya que considera que el desarrollo de la energía nuclear tiene con fin la creación de armas nucleares. Sin embargo, los analistas –con los cuales concuerdo- descreen de un ataque solitario del Estado sionista, en virtud de que el contexto regional no le es favorable. Sobre todo luego de la “Primavera Árabe” –mediante la cual perdió a un aliado como Egipto- y del ataque a una flotilla de ayuda humanitaria que había zarpado desde Chipre hacia la Franja de Gaza, el 31 de Mayo del 2010, lo cual generó un distanciamiento con Turquía. Por lo tanto, estas amenazas son tomadas como un pedido de auxilio y apoyo a los EEUU, porque Israel no ve lejos un conflicto armado. Ya lo manifestó Netanyahu luego de la reunión: “Estados Unidos es grande y está lejos, mientras Israel es pequeño y está cerca de Irán... y por supuesto tenemos diferentes capacidades”[2], en referencia a la percepción de Obama con respecto a la controversia.

            Pero, ¿por qué digo que es el conflicto que se avecina? Porque el discurso de lo mandatarios de los EEUU, Israel e Irán se han endurecido a partir de que se encuentran los tres próximos a elecciones. En Irán se celebraron la semana pasada elecciones legislativas, las cuales han tenido un resultado adverso para Ahmadineyad y que harán más difícil la gobernabilidad; en los EEUU ya lo hemos descrito; y en Israel se celebrarán el año próximo elecciones – en las cuales Netanyahu buscará su reelección-, y como representante de la derecha israelí, la cual es más dura - promociona la cultura judía, enfatizando el nacionalismo a través del culto a la bandera y al heroísmo de los hombres- su endurecimiento será lógico.


            De esta forma ya empezamos a advertir una serie de signos que pueden derivar en un conflicto armado, el año próximo. ¿Por qué el año próximo? Porque los EEUU no se embarcará en un conflicto de éstas magnitudes en marco de la crisis económica y electoral en la cual se encuentra. Esto le dará cierto tiempo a Irán para replantear su posición o endurecerla aún más. Sólo el tiempo nos dirá que ocurrirá.

miércoles, 7 de marzo de 2012

Crisis económica en España

          En las columnas que hemos compartido hasta el momento, frecuentamos temas de política interméstica, ya que un problema externo ha tenido el potencial de alterar el equilibrio político afectando intereses particulares al interior del país. Se ha denominado a esta posición “malvinización de la política exterior” de la Argentina, término con el cual no estoy de acuerdo ya que como he dejado asentado, mi posición es de apoyo a la estrategia que se ha adoptado hasta el momento. Pero justamente, como ya he tratado esta temática, para el día de hoy quería retomar el que continúa siendo el tema central en marco de la agenda internacional, y es la crisis económica a nivel mundial. Para esto, nos enfocaremos en el caso de España.


            Igualmente, este tema es de incumbencia para los ciudadanos argentinos, ya que a partir de la crisis del año 2001 de 36429 inmigrantes argentinos en España se trepó a 150242 en el año 2006. Sin embargo, la crisis económica española ha afectado de manera tal la generación de empleos, que en el 2011 la cantidad de inmigrantes argentinos había bajado hasta 120012. España es el principal destino elegido por los inmigrantes argentinos representando un 28.40%, por encima de los EEUU (17.86%) y Paraguay (7.65%). Vale decir que la primera ola de emigración se produjo durante la última dictadura militar, entre 1976 y 1983, teniendo como destinos principales a España, Estados Unidos, México y Venezuela. Pero a partir de los años 1990, debido a que se suprimió la necesidad de las visas entre la Argentina y Estados Unidos –cuestión que ya no es tal- mucha cantidad de argentinos emigraron hacia el país norteamericano. La última ola de emigración se dio –como mencionara antes- durante la crisis del año 2001, siendo el principal destino Europa, y en especial España, aunque también se produjo un aumento de la emigración hacia países vecinos, en especial Brasil, Chile y Paraguay.


            ¿Por qué traigo a colación esto? Por los controles migratorios rigurosos que se están aplicando desde el año 2002, especialmente a los latinoamericanos, quienes no necesitan visa de ingreso a España. Esta situación se produce más allá de que el ex presidente del gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, prometió un trato acorde a los vínculos históricos entre ambos países. Los extranjeros deben presentar

               “(…) pasaporte válido con vigencia no menor a seis meses, pasaje ida y vuelta con una fecha de retorno no superior a los 90 días, período máximo de permanencia en la UE, y seguro médico de viajero. También deben demostrar solvencia económica a través de una tarjeta de crédito o dinero en efectivo y/o cheques de viajero, con un promedio disponible de gastos de 57 euros por día de estancia o un mínimo de 513 euros en efectivo. Asimismo, los turistas tienen que presentar la reserva del hotel donde se van a alojar o una nota de invitación emitida por un residente en España, donde vaya a alojarse, realizada ante la Policía nacional. Este último requisito de entrada es el que más dificultades está generando, ya que obliga a los turistas a reservar hoteles con anticipación, lo que limita especialmente a los más jóvenes que van a recorrer Europa” (Puntal, 2008).[1]

            Introduciéndonos en la situación económica de España, el desempleo alcanzó a finales de febrero un nuevo récord, con más de 4,7 millones de desempleados, de acuerdo al Ministerio de Empleo -tiene la tasa de desempleo más elevada de los países industrializados- y las previsiones del Gobierno son que seguirá aumentando en 2012 hasta alcanzar una tasa media del 24,3%, o sea 6 millones de desocupados. El sector económico más importante de España ha sido la construcción, y debido a  la crisis del mismo –es el quinto año que presenta desaceleración- se espera que el país entre en recesión en el 2012. A su vez se conoció que el déficit público español en 2011 ascendió al 8,51% del PIB, muy por encima del objetivo del 6%. Según el gobierno de Mariano Rajoy, perteneciente al Partido Popular de corte conservador, estas cifras justifican la reforma laboral tan criticada en estos días.

            El 10 de febrero se aprobó una nueva reforma para flexibilizar el mercado laboral, incluyendo una rebaja de las indemnizaciones por despido, contrato para impulsar las contrataciones indefinidas de jóvenes en las pymes, los convenios que prevalecerán serán entre la empresa-trabajador y no los colectivos que puedan gestionar los sindicatos entre otros puntos. La aplicación de la flexibilidad laboral requiere de un proceso de desregulación del mercado laboral basado en la libertad de contratación y el contrato individual de trabajo, flexibilizando los antiguos mecanismos logrados por los sindicatos en el siglo XX. Se permite así mejorar los servicios, mayores oportunidades a las empresas y a las personas, en un contexto donde las estructuras rígidas y las legislaciones abultadas y complejas resultan en impedimentos a ser superados en pos de mayor libertad para la población económicamente activa.

            Ésta medida más los recortes anunciados en marco de las comunidades autónomas  –se ha solicitado a las comunidades autónomas recortes que alcancen 10 mil millones de euros y despidos de empleados públicos- provocó una ola de manifestaciones en todo el país, sobre todo en ciudades como Madrid, Barcelona y Valencia. Aunque, hay que señalar que, el recorte se debe a que ha existido una expansión del gasto público durante ocho años que tarde o temprano se tornó insostenible. La cuenta en sencilla: se gastaba más de lo que ingresaba. Allí radica el problema, el cual ya he manifestado se puede reproducir en nuestro país, sino se reduce el gasto público y comienza una fuerte redirección de los fondos para invertir y atraer inversión extranjera.


            El contexto es complejo para una España que supo ser atractiva para los inmigrantes latinoamericano, los cuales ven en estos datos factores de expulsión. La realidad marca que la crisis económica se ha instalado en el país ibérico, derrumbando la frase de que “allá –por España- no hay crisis, sino que no están acostumbrados como nosotros a soportarlas”.

lunes, 5 de marzo de 2012